En la ceremonia de los Óscar del año 1999, Sam Mendes ganó el premio a "Mejor Director" por su trabajazo en American Beauty; esa película que cuenta con una de las escenas más míticas de la historia del Séptimo Arte.
A pesar de que la escena de las flores sea excepcional, hoy os voy a presentar - honorando a Sam Mendes por su dirección - otra distinta en la que dos de los protagonistas observan un vídeo casero, grabado por el chico, en el que lo único que se ve es una bolsa moviéndose de un lado a otro por la fuerza que el viento ejerce sobre ella.
No os la enseño porque me parezca impresionante - que también - sino porque hace poco leí que en realidad esta bolsa "bailarina" está basada en una experiencia real del propio director... Por lo que, podríamos decir que esta confesión - tan sumamente cautivadora y, al mismo tiempo, desconcertante - es una declaración sincera de Mendes a todos los espectadores de su película. Y, quizás, un intento para que comencemos a apreciar toda esa "vida" detrás de "las cosas".
Que la disfrutéis.
Jerry
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