Aprovechando que este viernes se
estrena en cines la secuela del reboot
trekkie de las andanzas de la Enterprise por el espacio exterior, decidí
volver a ver el filme dirigido por J.J Abrams en 2009 para ir al cine más
fresco que una lechuga.
Este filme, que cuando vi en
el cine tampoco me pareció excelente, en su segundo y tercer visionado me
pareció una increíble cinta de aventuras con la que el maestro Abrams se ganó
un puesto en la cima de los directores de películas de temática extraterrestre.
Y, oye, la jugada no le ha salido nada mal; ahora va a estrenar Star Trek: En la Oscuridad y dentro de
poco comenzará el rodaje de Star Wars Episodio VII. Temblemos de emoción.
● Año: 2009
● Director: J.J. Abrams
● Cast:
John Cho, Chris Pine, Zachary Quinto, Zoe Saldana, Eric Bana, Ben Cross, Bruce
Greenwood, Simon Pegg, Winona Ryder, Leonard
Nimoy…
●
Música:
Michael Giacchino
●
Nominaciones a los Óscar: Mejor Maquillaje (Ganadora), Mejor
Edición de Sonido (Nominada), Mejor Sonido (Nominada), Mejores Efectos
Especiales (Nominada)
●
Duración:
126min.
Star
Trek
cuenta la historia de James T. Kirk (Chris Pine) y Spock (Zachary Quinto), humano
y vulcaniano respectivamente, que se enrolan en la flota estelar; hecho que
llevará a que sus destinos se encuentren a bordo de la famosísima nave USS Enterprise. Sin embargo, y mientras
intentan lidiar con los ataques de un capitán romuliano llamado Nero (Eric Bana)
procedente del futuro, ambos protagonistas tendrán que aprender a cooperar si
quieren que los planes del villano no tengan éxito.
Aprovechando el viaje en el
tiempo de Nero, J.J. Abrams nos ofrece un desarrollo totalmente distinto de la
historia de esta interestelar saga que dará paso a que los eventos de las
futuras películas puedan diferir totalmente de obras trekkies anteriores sin que los fans más acérrimos de la misma se
sientan ofendidos. Esto es así porque, no sólo se respeta toda la historia anterior
de la saga, sino que se mantienen algunos de los aspectos que – según lo que he
leído – eran fundamentales en ella; como la relación de amistad que termina estableciéndose
entre Kirk y Spock, y como la tripulación al completo de la USS Enterprise.
Personalmente no soy, ni por
asomo, un fiel seguidor de Star Trek.
A pesar de que había oído hablar de la misma, yo cuando era pequeño sólo tenía
ojos para Star Wars. Sin embargo, con
este reboot de Star Trek, J.J. Abrams da una segunda oportunidad a todos aquellos
que, o bien en su momento no pudieron engancharse
a la saga o bien no quisieron. Y yo soy uno de ellos: me ha atrapado en sus redes trekkies.
Y es que, StarTrek es una película de
aventuras trepidante, llena de humor, de personajes entrañables, de una música
absolutamente perfecta, de un manejo de la cámara a la par que peculiar,
asombroso, y de unos efectos especiales totalmente merecedores de su
nominación.
Con una introducción tanto épica como emocional, la Star Trek de
Abrams termina ofreciéndonos un espectáculo cinematográfico soberbio localizado
en un espacio más creíble y silencioso que cualquier otro que hayamos podido ver en el que unos
divertidos, creíbles y entrañables personajes terminan componiendo la
mitiquísima tripulación de la USS
Enterprise.
No dejéis de verla; si Star Trek: Into Darkness es la mitad de
buena que esta película, el espectáculo está asegurado.
“Live long... and prosper”, señores.
●Te
gustará si:
disfrutas de un espectáculo cinematográfico lleno de aventuras, increíbles personajes y constante secreción de adrenalina.
●
No te gustará si:
los filmes centrados en aventuras por el espacio no terminan de convencerte.
Jerry
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