viernes, 23 de octubre de 2015

Viernes Criticón: La Cumbre Escarlata

Cuanto más voy al cine, menos sorprendentes me parecen las tramas de las películas que veo, y más desilusionado me siento con grandes personalidades que antaño conseguían asombrar a un crío para nada experimentado en el arte de ir al Templo Cinéfilo pero que, con el irremediable paso del tiempo, se ha convertido en un indomable maniaco que sólo se dedica a introducir en todo juicio cinéfilo que hace la palabra “previsibilidad”.

Ya os comenté que la reina de ese catastrófico término que ahora domina la cartelera española no es otra que Regresión, el nuevo – pero mediocre - trabajo de Amenábar, y aunque muchos de vosotros penséis que sólo digo eso porque estoy cumpliendo con mi ya obsoleta costumbre de hacer desangrar a todo producto cinematográfico patrio, en realidad no es así.

Porque que yo sepa Guillermo del Toro no es español.

● Año: 2015.
● Director: Guillermo del Toro.
● Cast: Mia Wasikowska, Jessica Chastain, Tom Hiddleston, Charlie Hunnam, Jim Beaver…
● Música: Fernando Velázquez
● Duración: 119min.


En primer lugar, y a pesar de lo catastrofista que haya sido la introducción a esta totalmente subjetiva crítica, he de reconocer que no pondría en la misma categoría al trabajo de Del Toro y al de Amenábar. La gran diferencia que hace a estos dos filmes incompatibles es que, así como la cinta protagonizada por Hermione Granger pretendía engañar al espectador cayendo en la inevitable pretensión, lo nuevo del director de la fantástica El Laberinto del Fauno es consciente de lo que es y no pretende ser otra cosa.

Partiendo de esta recurrida – pero no por ello menos válida – herramienta, Del Toro opta por ofrecer al público una película con una temática ordinaria que sólo brilla porque está ambientada en una espectacular y putrefacta mansión llena de secretos y de fantasmas visualmente aterradores pero brutalmente desaprovechados.


Y es que, muy en contra de lo que muchos podáis pensar, La Cumbre Escarlata no es una historia de fantasmas, sino uno de esos culebrones que muy bien podría recibir el atroz título de “película alemana de sábado por la tarde”. Una película alemana que, paradójicamente, cuenta con un reparto muy conocido (pero no por ello sobresaliente, atención), un diseño de producción fantástico y un inteligente y admirable uso del sonido. Y ya.

Por lo tanto, y después de haber comprobado con mis propios ojos que desde El Laberinto del Fauno no veo las obras de Del Toro con los mismos ojos, no me extraña nada que tanto Benedict Cumberbatch como Emma Stone, por presuntos “problemas de agenda”, decidiesen rechazar las ofertas que se les habían hecho para aparecer en un largometraje que no iba a aportarles gran cosa por la ordinariez de su trama y lo previsible que se hacen los secretos de la llamada Cumbre Escarlata.


De todas formas, teniendo en cuenta que últimamente internet ha ardido con noticias relacionadas con el que será el estreno del año, todo esto que digo puede ser fruto de mi actual – y exclusiva - inmersión en la galaxia muy, muy lejana, que despierta a mi “yo” más friki y deja un poco más de lado a ese otro “yo” más cuerdo.

Supongo que The Martian me gustará más. Por eso de los viajes espaciales. Y tal.

●Te gustará si: te basta con ver una película con un diseño de producción y de sonido excelente, o si disfrutas con las tramas de las películas alemanas de sábado por la tarde.

● No te gustará si: crees que vas a ver o una historia de fantasmas, o un relato original que no induzca el más descarado encefalograma plano.

Jerry
Imágenes vía DigitalTrends
Póster de IMP Awards

1 comentario:

  1. Hola! Yo la verdad es que me dijo mi hermana de ir pero no me llamaba nada la atención y no creo que la vea.

    Gracias pro la crítica.

    Un saludo!

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