Soy consciente de que
normalmente en esta sección comento distintos rodajes de películas que parece que están malditos, filmes que cuentan con siniestros rumores o me limito a destripar los secretos más puramente malditos de prestigiosos directores como Peter Jackson.
Sin embargo, esta vez voy a prescindir de la tendencia cinematográfica de esta sección para dar paso al debate de fenómenos de la llamada "caja tonta".
Voy a contaros una terrible leyenda urbana de una de las series infantiles más famosas de todos los tiempos que, en su momento y en el presente, fue motivo de furia, angustia y lloros...
Sí, voy a hablar de la leyenda del final/conclusión de la serie Doraemon.
Sin embargo, esta vez voy a prescindir de la tendencia cinematográfica de esta sección para dar paso al debate de fenómenos de la llamada "caja tonta".
Voy a contaros una terrible leyenda urbana de una de las series infantiles más famosas de todos los tiempos que, en su momento y en el presente, fue motivo de furia, angustia y lloros...
Sí, voy a hablar de la leyenda del final/conclusión de la serie Doraemon.
Doraemon es una serie manga de origen japonés que cuenta las
desastrosas andanzas de un chico llamado Nobita
quien, siempre que tiene algún problema, acude con escandalosos lagrimones a su
“gato cósmico” para que éste le ayude
a poner fin a toda desgracia personal. No voy a decir nada más del argumento
porque considero que el 90% de todos los que lean esta entrada sabrán a la
perfección de qué trata, ya que Doraemon
es una de las series japonesas de mayor éxito mundial.
Sin embargo, muchos de
vosotros pensaréis que esta serie es una verdadera desgracia hecha dibujos
porque habréis oído esa maldita leyenda de tradición popular, que sólo se
transmite vía “verborrea express”, y que
afirma algo cruel y despiadado: en el último episodio de Doraemon se descubre que Nobita está en coma y que todo lo que ha
ocurrido ha sido producto de su desdichada imaginación.
Pues, señores, siento deciros
que esa afirmación es absolutamente falsa: está basada en un cómic que alguien
publicó en internet en el que, a través de dibujos, se mostraba cómo un Nobita carente
de extremidades superiores, dormía apaciblemente mientras su madre lloraba a su
lado. Claramente, su autor NO era fan de esta serie...
Doraemon es una serie que carece de final. Es más, ¡aún sigue en
emisión en la cadena de televisión japonesa AsahiTV!
Así que, queridos lectores, podéis dormir tranquilos: Nobita no soñó con Doraemon por estar sumido en un coma, Nobita sigue viviendo aventuras.
Jerry
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