A veces los que nos
autodenominamos seriéfilos nos
comportamos como críos. No es rara la ocasión en la que alguno de nosotros,
después de haber presenciado la muerte de uno de nuestros personajes favoritos,
ponemos el grito en el cielo y orgullosamente afirmamos que no vamos a volver
la serie que hasta ese día nos tenía enganchados porque, sin ese personaje en
cuestión, nada será lo mismo.
Curiosamente, esa falsa
lealtad se solapa con un a menudo inconsciente sentimiento de traición que precede
al sacrificio y que nace del simple y disimulado hecho de que la serie en sí
misma ya no era lo mismo. Porque sí, señores, normalmente dejamos de ver una
serie porque nos ha dejado de gustar, no porque temamos que vaya a dejar de
hacerlo.
Si no, que se lo pregunten a Homeland.
● Creador: Howard
Gordon, Alex Gansa
● Género: Thriller
● Reparto: Claire
Danes, Rupert Friend, Mandy Patinkin, Nazanin Boniadi, Laila Robins, Tracy
Letts, Nimrat Kaur, Michael O’Keefe, Mark Moses…
● Banda Sonora: Sean Callery
● Duración: 5
Temporadas (2011 - Presente)
● País de Origen: EEUU
No era ningún secreto que la
tercera temporada de una de las apuestas estadounidenses más potentes de los
últimos años fue un auténtico fiasco. El desgaste de su trama, que se empeñaba
en girar sobre el mismo eje durante todos y cada uno de sus asaltos, era más
que evidente y, aunque a muchos de los seguidores de la serie les encantase, la
dirección que se estaba tomando no era la más acertada.
Homeland no era una historia de amor. Homeland siempre ha sido un thriller que abordaba, con una
indiscutible clase, la problemática del terrorismo islámico a través de los ojos
de un agente de la CIA llamada Carrie Mathison. Punto. Que nuestra protagonista
tropezase con una piedra a lo largo del camino por la que llegó a sentir algo
más que cariño es otra historia. Al fin y al cabo, estábamos ante una mísera
piedra en una larga y prometedora ruta por la pequeña pantalla.
Así que no, no perdíamos nada
con ese final de temporada. Al revés: ganábamos.
A pesar de que me supuso un
esfuerzo terminar la tercera temporada de esta producción de la cadena Showtime, creo que fui de los pocos que,
poniendo en práctica el principio que afirma que una gran decisión - como la
que se tomó en aquel episodio llamado The
Star - suele llevar implícito un gran cambio, deposité mi confianza en la
cuarta entrega. Nadie debería haberse creído que, después de haber agarrado al toro por los cuernos, los responsables de Homeland iban a dejar que su joya de la corona se fuese a pique. Y, efectivamente, no lo hizo.
Partiendo de la base de que la
localización principal de esta historia se traslada a Islamabad (Pakistán) y de
que nuestra protagonista, ahora apodada “The
Drone Queen”, se encuentra en un momento sumamente difícil de su vida, sólo
podíamos esperar grandes cosas de la cuarta temporada de Homeland.
Y es que, aunque a muchos les pese, esta nueva entrega de la serie es fantástica.
Además de que la trama que se abre al espectador es bastante más interesante
que las dos últimas que la precedieron, el trayecto de la misma es un crecendo
constante que, en un momento dado, hace que la serie se vuelve totalmente loca
y que al espectador le explote la cabeza.
Sí: como en Kingsman. En esta temporada se alcanza
un punto en el que, cuando parece que todo está controlado, la historia empieza
a girar descontrolada, los personajes son llevados a límites hasta ahora desconocidos,
y la calidad de sus episodios se dispara. Después de ese Redux, Homeland alcanza
el cénit de su paso por la pequeña pantalla y consigue dejar al público sin
aliento, haciéndole saber que controla muy bien lo que hace, que ha sobrevivido
a uno de los declives temáticos más descarados de la historia reciente de la
televisión de calidad, y que sigue estando viva y coleando.
Porque sí, después de haber
visto la absoluta y deliciosa locura que es esta cuarta temporada, no puedo
aguantar las ganas de ver su ya emitida quinta entrega: una temporada que, si
mal no recuerdo, está ambientada en Berlín.
Olé, Carrie.
● Lo que MÁS me gusta:
que por fin asistimos al renacer de la gran serie de la que nos enamoramos en el
año 2011.
● Lo que MENOS me gusta:
que mucha gente se la habrá perdido por las razones equivocadas.
● Dónde la veo: la cuarta temporada de Homeland está disponible en formato DVD y Blu-Ray.
Jerry
Imágenes
vía Collider
Póster
de IMP Awards
Hola! Me encanta la serie, está genial! La 5ª temporada también está muy bien pero para mi es la más floja de todos.
ResponderEliminarUn saludo!
¿Si? Pues a ver si me pongo ya a ver la quinta temporada, ¡que aún la tengo pendiente!
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