Siento debilidad por Saoirse
Ronan. Esa jovencita de nacionalidad irlandesa que con tan solo doce años fue
capaz de obtener una nominación al Oscar por su trabajo en Expiación (Joe Wright, 2007), me conquistó hace ya tiempo gracias a
un filme que, aunque no se ganó ni el favor del público ni de la crítica, goza de
una prestigiosa fama entre las cuatro paredes que componen mi casa.
Hablo de The Lovely Bones (Peter Jackson, 2009), un filme que aborda – con
un estilo tan creativo como extravagante - la problemática familiar que supone
perder a una hija. Aún recuerdo cómo la historia de Susie Salmon, asesinada el
6 de Diciembre de 1973, convirtió en costumbre que yo, un chico en ocasiones
tachado de insensible, desarrollase la extraña costumbre de dar rienda suelta a
sus sentimientos en la sala del cine. Es ahí, en la habitación en la que todo
espectador queda rodeado por desconocidos, donde la oscuridad se convierte en
el mejor cómplice para un cinéfilo tan remilgado como yo. Un cinéfilo que no
sólo presume de que la única ocasión en la que derrama una lágrima es viendo
una película, sino que además, reniega de las películas del género romántico.
Hasta que deja de hacerlo.
● Año: 2015
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Director:
John Crowley
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Cast:
Saoirse Ronan, Emory Cohen, Domhnall Gleeson, Jim Broadbent, Julie Walters…
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Dirección Fotografía:
Yves Bélanger
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Banda Sonora:
Michael Brook
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Nominaciones a los Óscar: Mejor Película (Nominada), Mejor Actriz
(Saoirse Ronan - Nominada), Mejor Guión Adaptado (Nominada)
●
Duración:
112min
Muy a pesar de los eternos
reproches que, a lo largo de mi corto recorrido por la red, he dirigido hacia
un género cinematográfico que para mí se estaba hundiendo en el agujero más
profundo de la vulgaridad, tengo que reconocer que, por una vez, un drama
romántico como es Brooklyn ha
conseguido emocionarme. La historia de Eilis, una veinteañera de origen
irlandés que, tras emigrar a los Estados Unidos, tiene que afrontar la difícil
decisión de escoger entre dos hombres con los que pasar el resto de su vida,
puede parecer corriente, cursi y ñoña. Es más, muchos defenderán que se trata
de uno de esos títulos que – inexplicablemente – ha aspirado a la estatuilla de
Mejor Película sin de verdad merecerlo.
Sin embargo, y a pesar de los
esfuerzos de este colectivo de detractores por devaluar un filme de
indiscutible calidad, lo nuevo del responsable de la dirección del último
episodio de la segunda temporada de True Detective
se ha convertido en una de las más sinceras y realistas historias de amor de
los últimos tiempos.
Habéis oído bien. La historia de
Brooklyn es fantástica, Saoirse Ronan
está fantástica, la banda sonora es fantástica y la dirección es fantástica.
Todo es fantástico en una película que, aunque parezca un melodrama simplón
acerca del recurrido dilema de “chica no sabe decidir entre dos chicos”,
resulta exageradamente conveniente para unos tiempos en los que nuestros seres
queridos deben partir al extranjero para buscar un trabajo mejor, una oportunidad.
Y es que en Brooklyn la adorable Eilis
no sólo tendrá que elegir entre el italiano americanizado o el irlandés
pelirrojo, sino que además tendrá que despedirse de su tierra natal, afrontar
con valentía su nueva – y prometedora – realidad y, más adelante, elegir entre
dos mundos que no podrían ser más distintos.
Porque no. No es fácil escoger
un hogar. No es fácil adaptarse a una nueva realidad para que después aparezcan
dos posibilidades de vida tan distintas que ni siquiera se podrían comparar la
una a la otra. Y es precisamente ahí donde Brooklyn
destaca: la historia de Eilis es capaz de generar en el espectador tanto
afecto por las dos alternativas que se le ofrecen a la protagonista, que es
extremadamente difícil posicionarse. Aunque estemos acostumbrados a decantarnos
por una u otra de las opciones que habitualmente se le plantean al personaje
principal de nuestras películas favoritas, en Brooklyn no somos capaces de decidir. Lo hace Eilis. Y nosotros lo
respetamos.
Está claro que Brooklyn no se habría merecido el título
de Mejor Película del año (ese privilegio se lo habría reservado a La Habitación), pero lo que sí se ha
ganado, además de todas sus nominaciones, es mi respeto por una de las actrices
más prometedoras del nuevo Hollywood. Saoirse Ronan, con su aparente
delicadeza, sus enigmáticos ojos, y su fascinante naturalidad ante las cámaras,
consigue que este cinéfilo siga emocionándose delante de la pantalla y empiece
a pensar que no todo drama romántico es un chicle de color rosa que se estira,
y se estira, y se estira.
Porque Brooklyn, por mucho que os lo digan, no lo es.
●Te
gustará si:
disfrutas de ese tipo de cine que desprende energía positiva y que se ve
arropado por unas interpretaciones y una historia que, con una pasmosa
facilidad, consiguen llegar al corazón del espectador.
●
No te gustará si:
tienes terminantemente prohibido ver películas con una temática romántica.
Jerry
Imágenes
vía Collider
Póster
de IMP Awards
Hola! Me apetece mucho verla pero creo que esperaré y no creo que vaya al cine a verla.
ResponderEliminarUn saludo!
¡Anímate a ir al cine, Beatriz!
EliminarLa verdad es que yo sí me decanté claramente por una de sus dos opciones mientras veía la película, pero en ningún momento me pareció predecible su decisión. Estuve con la duda hasta el final, y eso es lo que la hace ser una película especialmente buena dentro de las de su género, siempre tan lleno de estereotipos y de finales prefabricados. De todas formas, admito que este tipo de filmes siempre han sido mi debilidad... deberías darles una oportunidad más a menudo! A pesar de que a veces te encuentras como bien dices con auténticos chicles interminables de color rosa, detrás de este género también se esconden auténticas joyas.
ResponderEliminarUn saludo Jerry!
K, tienes toda la razón. Soy consciente de que tengo que frecuentar más el género... Así que, quién sabe, así como este año he decidido dedicar más tiempo al género documental, a lo mejor el año que viene le doy un repaso al romántico. Seguro que encuentro películas de verdad merezcan la pena (¡y acepto recomendaciones!)
Eliminar¡Muchas gracias por comentar, K!
Pues para cuando te animes, de las más recientes del género romántico te recomiendo "Lejos del mundanal ruido". Y si te gustó Saoirse Ronan, en "Expiación. Más allá de la pasión" la verás muy jovencita haciendo un papel que a mí por lo menos me impactó muchísimo, incluso la nominaron al Óscar por ello!
EliminarSaludos Jerry!
¡Ambas están vistas! Incluso de la segunda me llegué a leer la novela. Muy recomendables las dos, estoy plenamente de acuerdo
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