Reconozco que cuando descubrí el tráiler de La Fiesta de las Salchichas, sentí tanto
entusiasmo que, a pesar de que eran altas horas de la noche y de que ya me
encontraba fuera de mi muy estricto horario de entre semana, no pude aguantar
la tentación de dedicar unas palabras a los dos minutos y medio que acababa de ver.
En aquel corto avance, el largometraje de animación
ideado por Seth Rogen parecía tan gamberro, ingenioso y divertido que de pronto
sentí la imperiosa necesidad de que fuese estrenada en nuestro país cuanto
antes. Porque, aunque no soy para nada un consumidor habitual del cine de Rogen
y compañía, el tráiler era magnífico. Así que hace unos días, acompañado por mi
mejor humor, entré en la sala dispuesto a disfrutar como un crío.
Y salí con la cabeza a punto de explotar.
●
Año: 2016
● Director: Conrad Vernon & Greg Tiernan
● Cast: Seth Rogen, Kristen Wiig, Jonah Hill, Bill Hader,
Michael Cera, James Franco, Danny McBride, Craig Robinson, Paul Rudd, Nick
Kroll, Edward Norton, Salma Hayek…
● Dirección Fotografía: h
● Banda Sonora: Alan Menken & Christopher Lennertz
● Duración: 89min.
Como decía, el tráiler de La Fiesta de las Salchichas era tan efectivo que consiguió
arrastrar al suficiente público a las salas de Estados Unidos como para darle
el título de estreno más prolífico de aquel fin de semana de Agosto, una hazaña
para nada desdeñable si tenemos en cuenta que los meses de verano son de los
más competitivos del año. Nueve semanas después, y sin tener en cuenta las
cifras del mercado internacional, la cinta de Rogen se ha alzado con 97
millones de dólares locales, una cifra que posiblemente sea superada durante su
paso por Europa y Asia.
Y es que hay que reconocer que la historia de un grupo
de alimentos que descubre que sus “dioses” (humanos que habitan el llamado “Más
Allá”) no son más que unos despiadados y sádicos monstruos que se dedican a
torturar y asesinar a todo producto que abandone el supermercado, es extremadamente atractiva. Sobre todo porque, además de ser muy
original, estaba infestada por un aura políticamente incorrecta que – cuanto
menos – llamaba la atención.
Sin embargo, La Fiesta de las Salchichas es mucho más de lo que parece. No sólo me refiero a que, valiéndose de productos alimentarios de distintos rincones del mundo y situaciones verdaderamente acertadas, la película construye una interesante – y sanguinaria – crítica social y religiosa, sino que además su nivel de gamberrismo alcanza unos límites que rozan el mal gusto y tontean con la vulgaridad. Porque, señores, una cosa es querer ser gracioso a costa de bromas introducidas en situaciones disparatadas, y otra muy distinta es utilizar la sexualidad y lo soez para rellenar los huecos que deja un guión que no ha sido horneado durante el tiempo que debiera.
Yo entiendo que Seth Rogen y compañía se lo querían
pasar bien haciendo lo que les daba la gana, pero su película, que podría haber
sido brillante, termina precipitándose al vacío por el poco cuidado que se ha
tenido con sus diálogos (entonar cuatro obscenidades por cada seis palabras sólo
es gracioso para los adolescentes a los que sus padres no dejan decir palabrotas)
y por la poca necesidad que hay de ser vulgar por el simple hecho de serlo. Que
me contextualicen las bromas, que lo compro y acepto, pero que no me ofrezcan
esa acertada crítica social añadiendo un despropósito como es el 60% de la
basura que se dice durante su metraje.
A pesar de todo, hay que reconocer que esta gamberrada,
por mucho que no me convenciese por eso de que es soez y simplista en cuanto a
diálogo y lenguaje se refiere, cuenta con escenas que rozan la perfección.
Partiendo de aquel accidente en el supermercado (que hace una perfectísima
alusión al cine bélico), y pasando por el desengaño presenciado en la cocina de
una de las clientas del supermercado o el encuentro con el pizzi-cida, hay momentos de La
Fiesta de las Salchichas que son dignos de ser aplaudidos.
Eso sí, aquella escena pasional que da cierre a la
película es lo más incómodo, grotesco e innecesario que he visto en el cine
hasta el momento.
Y, cuidado, que he visto mucha mierda.
●Te gustará si: eres muy poco exigente con los diálogos de las
películas o si, simplemente, la calidad de muchas escenas te parece suficiente
como para soportar tanto taco, tanto pene y tanta vagina sacada de contexto.
● No te gustará si: crees que no serás capaz de aguantar el paupérrimo vocabulario de sus personajes o sus chillidos de placer. Porque, además de que el
contenido sexual de la película alcanza niveles absolutamente
desproporcionados, su contenido lingüístico es, honestamente, para mear y no
echar gota. Ya lo he dicho.
Jerry
Imágenes vía Screenrant
Póster de IMP Awards
Imágenes vía Screenrant
Póster de IMP Awards
Hola! La verdad es que esta película no me llama. Gracias por la crítica.
ResponderEliminarUn saludo!
Me parece que tu critica sale un poco de contexto frente a el lenguaje q se abarca en la película debido a que es para público adultos y no para niños
ResponderEliminar