Viernes Criticón: El Niño 44

Después de haber visto Jurassic World, Tomorrowland, Nuestro Último Verano en Escocia y Lejos del Mundanal Ruido, poco título de la parrilla cinematográfica española conseguía llamar mi atención. Sin embargo, por eso de que llevaba casi una semana sin pisar mi segunda casa, decidí ir a ver lo primero que encontrase.

Así fue como entré en la sala en la que se proyectaba El Niño 44, la nueva película de Tom Hardy, y he de reconocer que no fue del todo un accidente. Resulta que cuando vi su trailer, se me pusieron los pelos de punta porque parecía que estábamos ante otro papelón de Hardy en una historia que parecía francamente interesante... Pero cuando el estreno vio la luz en nuestro país, le llovieron críticas que descuartizaban cada uno de sus minutos, y eso me inquietó.

Con mucha razón.

● Año: 2015.

● Director: Daniel Espinosa.

● Cast: Tom Hardy, Noomi Rapace, Gary Oldman, Joel Kinnaman, Jason Clarke, Vincent Cassel…

● Música: Jon Ekstrand.

● Duración: 137min.

No estoy seguro de si estaba muy dormido por eso de que el Domingo hice una guardia en urgencias de la que aún no me había recuperado, o si la pareja de maleducados que tenía detrás fueron los responsables de amargar mi sesión de cine semanal. No lo sé, pero la conclusión a la que llegué cuando salí de la sala es que El Niño 44 me había aburrido.

Si os soy sincero, no entiendo de qué va la película de Daniel Espinosa. No sé si el eje sobre el que gira la trama es la investigación de las muertes de 44 niños en localidades cercanas al Moscú post-segunda Guerra Mundial, si lo que debería inquietar al espectador en realidad es ese villano con motivos poco realistas para intentar destrozar las vidas de los protagonistas, o si en realidad la clave de todo está en cómo surge el amor entre una pareja que, seamos francos, es de todo menos interesante.

Pero bueno, así es El Niño 44: una mezcla de historias que tendrían que encajar a la perfección pero que, por culpa de un guión tan torpe como predecible y de un extraordinario reparto fatalmente explotado, termina siendo una aburrida película que sólo se deja ver por las actuaciones de los fantásticos Hardy y Rapace. Tómalo, déjalo o cómetelo con patatas o con los nachos con queso que el niño que se sentó a mi lado en Jurassic World tardó media película en terminar (y son cuatro malditos nachos con cinco gotas de queso de bote).

Y sí, me da la sensación de que no dejo de repetirme, pero a estas alturas todos sabemos que unas buenas actuaciones no salvan a un filme del desastre. Por mucho que incluyas la inmensa pareja que forman Noomi y Tom (ay, qué recuerdos de La Entrega), y por mucho que Hardy siga demostrando que eso de actuar se le da tan bien que, más pronto que tarde, será nominado a la cotizada estatuilla dorada para que los cinéfilos no perdamos la esperanza en la cordura de la Academia, si la historia, el guión, y el ritmo de la película no son abordados con cierto nivel, la maquinaria termina por fallar y, en lugar de salir los créditos finales, aparece en pantalla un obsceno y descarado "Game Over".

Y aparece. La película falla tanto, que en varias ocasiones del segundo tercio de su metraje cerré los ojos con la esperanza de que, al abrirlos, El Niño 44 se convirtiese en la película que tanta expectación había despertado. Pero eso no ocurrió, y como no me gusta nada cómo me ha quedado esta entrada, y dado que estoy demasiado cansado y apático como para revisarla, cómanse esta basura de crítica como puedan. O no se la coman. O hagan lo que quieran con ella, que yo me retiro... la decepción de El Niñato 44 ha podido con todas mis fuerzas.

●Te gustará si: ver a Tom Hardy en la gran pantalla te parece suficiente razón como para alabar una película.

● No te gustará si: cuando vayas a ver la película piensas que tu opinión sobre ella va a ser superior a la que tienes de, por ejemplo, Tomorrowland.

Jerry

Imágenes vía Collider.

Póster de IMP Awards.