No sé exactamente cómo abordar
esta crítica porque Pacific Rim,
según múltiples críticos y opiniones de colegas, era el blockbuster por
antonomasia de este verano. La nueva película de Guillermo del Toro prometía
acción a raudales en un filme comercial de calidad suprema con unos masivos
robots muy alejados de los pasados de moda Transformers
de Michael Bay.
Yo siempre pensé que Guillermo
del Toro era un gran director. Su Laberinto
del Fauno me cautivó, y cuando vi las andanzas de su Hellboy en plena adolescencia quise vivir en un mundo con criaturas
de ese estilo. Por ello, casi me muero de pena al enterarme de que rechazaba la
dirección del filme El Hobbit por
problemas de calendario. Sin embargo, ahora mismo agradezco al karma que no permitiese
al director hacerse cargo de la trilogía Jacksoniana de Bilbo
Bolsón. Pacific Rim es más parecido a
Transformers de lo que me esperaba.
● Año: 2013
●
Director:
Guillermo del Toro
● Cast:
Charlie Hunnam, Idris Elba, Rinko Kikuchi, Charlie Day, Robert Kazinsky, Máximo
Martini, Ron Perlman
●
Música:
Ramin Djawadi
●
Duración:
137min
Habéis oído bien: Pacific Rim no me ha parecido para nada
ese prometidísimo blockbuster del que todo el mundo hablaba. Es más, no
entiendo cómo se puede comparar esta historia de “Metroid Prime Vs. Godzilla”
a cintas como Star Trek: En La Oscuridad,
porque, seamos honestos, la presencia de dos humanos conectados
neurológicamente en la cabeza del llamado Jaeger
no es nada personal. Y menos aún cuando sus pilotos son de lo más patético que
he visto en la gran pantalla recientemente.
No es que el guión sea malo,
ni que las interpretaciones de los actores sean penosas (aunque el doblaje deja
mucho que desear), el problema que destroza la película es ese 70% de escenas
entre los humanos pobladas de diálogos totalmente lamentables. El resto de la
película (ese espectacular 30%) está lleno de correctísimas escenas de acción
compuestas por increíbles efectos especiales y criaturas alucinantes que pelean
entre sí y que destrozan ciudades con mayor soltura que Henry Cavill en El Hombre de Acero.
Pero que no os atormenten mis
impresiones, porque he de decir que el principio de Pacific Rim es espectacular y consigue que todo espectador babee
ante esos Kaijus salidos de las profundidades del océano. Sin embargo, el globo se desinfla rápidamente: esa premisa
de que los robots utilizados por los desesperados humanos van a tener más “humanidad”
que los irritantes Transformers es una
de las mayores mentiras que he oído en mi vida.
¿Por qué? Pues porque, además
de que los humanos presentes en la película son de todo menos humanos (¿qué
demonios les pasa a los dos científicos? ¿les han dado un chute de LSD o es que
son un quiero-y-no-puedo de
excentricidad?), en el momento en el que más importa la acción humana en las
peleas contra las bestias marinas, las escenas dentro del Jaeger son totalmente
prescindibles porque, para empezar, el espectador no va a entender nada de lo que
pasa en la cabina de mando por lo caóticas que son y, para terminar, la conexión neurológica termina
siendo una broma de recuerdos entrelazados sin mayor importancia que, aunque la
tuviese, nos importaría un comino porque los personajes humanos son como Sam
Witwicky, sus padres y Micaela Banes en Transformers:
prescindibles.
Intentado mezclar –
ineficazmente - comedia absurda, con acción impresionante y dramatismo humano
ante la pérdida de seres queridos, Guillermo del Toro ha creado un monstruo que
sólo merece la pena ver en el cine porque las batallas son impresionantes, los
efectos especiales dignos de aplauso, la banda sonora excelente, y porque Santiago
Segura pasaba por ahí (todos sabemos que siempre hace gracia ver a Torrente en la gran pantalla).
Y, por cierto, qué curioso que
nadie se queje de que en Pacific Rim
las ciudades quedan destrozadas en las peleas de Kaijus y Jaegers y, sin
embargo, El Hombre de Acero fuese
machacado por la crítica porque Metrópolis y Smallville quedasen reducidas a
cenizas.
Qué curioso que el director de
Pacific Rim sea el amado Guillermo
del Toro y que el de El Hombre de Acero sea el injustamente odiado Zack Snyder.
Repito: qué curioso.
●Te
gustará si:
unas espectaculares escenas de Robots Vs.
Monstruos – acompañadas de una gran banda sonora - te parecen suficientes
para salir encantado del cine.
●
No te gustará si:
lo que quieres ver es una película de acción en la que no te den ganas de
taparte los oídos cada vez que los protagonistas abran la boca.
Jerry
Los personajes humanos en estas peliculas.importan no como en Tranformers,ademas les dejan tiempo en desarrolarse y aunque algunos son tópicos,pero tampoco dicen tonterias cada vez que abren la boca,si dicen algunos tópicos vale,pero son buenos personajes en general.Del Toro,tambien los cuida aparte de la accion
ResponderEliminarObivamente humanidad,no tiene pero por lo menos no sueltan gilipolleces como los de Transformers.Esta pelicula es mejor que Transformers eso esta claro,ya que aparte de la acción cuida mas detalles,y se nota sobretodo la mano cuidadosa que le pone Del Toro
ResponderEliminarYo no se que película vio este señor para comparar Pacific Rim con Transformers, Una sola entrega de Pacific Rim, es mejor que las 3 de Transformers
ResponderEliminarPara nada comparto la crítica...bastante mejores diálogos en la peli que opiniones aquí vertidas por el crítico con comparaciones absurdas...
ResponderEliminarExcelente análisis. A mi "Pacific Rim" me encantó. Visualmente es impactante, y me asombré con cada toma, cada fotografía, cada detalle. Las escenas de acción son maravillosas porque SE ENTIENDEN (a diferencia de lo que hace Mr. Michael Bay en sus películas).
ResponderEliminarPor sobre todo, me gustó la idea de la cooperación internacional y que no sea “Estados Unidos” el único país capaz de salvarnos de una invasión.
Toda la historia es una excusa para homenajear a las clásicas películas japonesas de monstruos. Muy entretenida.
Te invito a mi propio análisis de "Pacific Rim" en mi página: http://on.fb.me/1eDPh4L
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